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Contribuir a la retroalimentación Qué le gusta a Carrasco Diaries de Wakaya Lounge:
Experiencia única! Estuvimos súper cómodos, la amabilidad del personal y la profesionalidad me encantó! Nos atendio una bartender llamada Franchesca, que nos preparo unos cócteles de alucine. Estoy encantado con el sitio y volveré sin duda! Ver todas las opiniones.
Para mí, que he estado en Ibiza, Bali, Tailandia y muchos otros lugares con clubes de playa, quizás este sea un poco menos exuberante y no esté en primera línea de playa. Sin embargo, considerando la concurrida playa de Valencia y Saler, ¡este fue el mejor lugar que encontramos para abrir nuestra temporada de playa! La comida en el restaurante era muy buena, con una paella deliciosa, el servicio en el salón fue bueno y el personal amable. ¡Incluso con tanta gente local en eventos privados, el personal nunca dejó de atendernos y preguntar si todo estaba bien! ¡Un gran día!
Mi novio y yo fuimos aquí en septiembre para comer algo después de verlo en un folleto de restaurante en nuestro hotel. Nos costó encontrar este lugar, está en una ubicación extraña. Tomamos algunos menús del bar que está en el área de la piscina y nos sentamos en una de las mesas y sillas frente a la piscina. Solo había otras 2 áreas ocupadas, alrededor de 5 personas en total en el lado de la piscina. El camarero vino y dijo que teníamos que gastar un mínimo de €10 para sentarnos allí/usar la piscina, lo cual obviamente habíamos planeado hacer de todos modos, pero no teníamos intenciones de usar la piscina, ni siquiera llevábamos una bolsa. Dijimos que solo estábamos ordenando comida y él dijo que teníamos que mudarnos al lado del restaurante. Tenía un inglés terrible, pero presumimos que por esto no servían comida del lado de la piscina/bar. ¡Entonces, ¿por qué tienen menús allí?! Otro camarero nos atendió en el restaurante y no hablaba nada de inglés. Pedí la paella de langosta para ambos señalándola y el camarero puso pan en la mesa y consiguió al otro camarero con más inglés para decirnos que teníamos que esperar unos 20 minutos e intentó que pidiéramos algo más mientras esperábamos, pero no queríamos nada más. Alrededor de 50 minutos después nuestra paella salió, Mi novio no pensó que estaba bien porque nunca habíamos comido langosta antes, pero hasta donde sabíamos, se veía un poco como langosta, pero esta se veía como langosta, así que la comimos de todos modos, pero cuanto más comíamos, más nos cuestionábamos porque esta tenía calamares y langostinos también, la que habíamos pedido debía tener langosta y espárragos. ¡Mientras comíamos, ¡noté que los camareros llevaban comida a personas en la piscina! ¡Después de decirnos que nos teníamos que mover! De todos modos, recibimos la cuenta y notamos que nos cobraron mal, pedí un menú y sí, ¡nos dieron la paella de langosta! Así que se lo dije al camarero y tuvo que traer al camarero que hablaba inglés, intentamos explicar que el camarero había tomado mal nuestro pedido y él dijo que deberíamos haber dicho algo antes de comerlo, lo cual sí, tenía razón, pero pensamos que estaba mal y luego no y luego sí y ¿cómo podríamos explicar a nuestro camarero que no hablaba inglés que estaba mal y luego tener que esperar otros 50 minutos por otro? Solo quería una disculpa del camarero que tomó mal nuestro pedido, obviamente íbamos a pagar porque lo comimos, pero toda la experiencia fue terrible. ¡También notamos en la cuenta que nos cobraron por el pan que el camarero puso en nuestra mesa, sin preguntar! Es un lugar agradable en una ubicación extraña con un personal grosero y tramposo con apenas inglés, una gran decepción.
Buena piscina y zona de descanso, aunque está al lado de una autopista. El servicio fue mixto y realmente decepcionante. Uno o dos miembros del personal parecían agradables, pero la mayor parte del tiempo nos trataron como una distracción no deseada. Pedí una Piña Colada y recibí un no tajante (aunque otras personas las estaban tomando y estaba en el menú de bebidas). Pedí un G&T en su lugar. Más tarde pedí una Piña Colada a otro miembro del personal, la cual preparó pero tardó unos 20 minutos porque se quedó en la barra durante mucho tiempo charlando con sus compañeros y atendiendo otras órdenes de clientes. Toda la visita estuvo llena de experiencias similares. Cuando nos trajeron los menús, parecía que nos estaban diciendo qué debíamos pedir. Cuando hicimos nuestras propias selecciones, se llevaron los menús y pudimos ver al dueño, al chef y al personal del bar discutiendo nuestra orden y mirándonos como si hubiéramos hecho algo realmente inapropiado. Todo fue simplemente extraño. Parecen pensar que están operando algún tipo de club súper exclusivo y de alta gama al que la gente se está peleando por entrar. No es el caso. Parecen necesitar la clientela pero no actúan como tal. Basándonos en las críticas, parece que otros han tenido experiencias similares. No me sorprendería si terminan yendo a la quiebra si siguen comportándose de esta manera. Está justo al otro lado de Pinedo Beach, así que terminé pasando parte del día allí.
Celebré mi cumpleaños y lo pasamos en grande, destacar la atención de Sita que fue muy amable y divertida y Francesca podía aprender un poco de ella y tratar mejor a los clientes, es un sitio que vamos a divertirnos no a qué nos pongan malas caras y los cubatas los ponía muy flojos.
La comida buenísima, pedimos tellinas, bravas y arroz del senyonet. No sabría decir cual me gustó más. El trato del personal inmejorable. Repetiré seguro :