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Contribuir a la retroalimentación Qué le gusta a Berta Cobo de Agirrebena:
Cenamos con el equipo de hockey y el trato fue muy bueno. Muy buenas pizzas, la espectacular y muy completa masa La verdad que sabe cómo se comportan con niños Ver todas las opiniones.
Lo que no le gusta a Alaitzgarro de Agirrebena:
Pedimos unas croquetas de jamon, eran como pelotas de tenis y muy bastas. Bocatas con demasiado aceite para mi gusto, y lo de la cebolla caramelizada nada (más bien algunos trozos crudos, para caramelizar hay que invertir mucho tiempo y aquello estaba casi sin hacer). Una pechuga recalentada que casi se necesitaba un cuchillo. Y unas pizzas muy pequeñas y con poco relleno para el precio que tienen. Atención muy buena... Ver todas las opiniones.
Siempre pedimos para comer en casa. Las pizzas están muy ricas y normalmente son puntuales con las entregas. En el restaurante no he comido nunca.
Decidimos realizar un pedido a domicilio y la experiencia fue decepcionante. El pedido consistió en dos pizzas, una ración croquetas caseras y una ración de patatas en dados con dos salsas. De todo lo pedido lo único que mereció la pena fueron las pizzas. Las croquetas estaban deconstruidas, las patatas estaban gomosas y en lugar de traer las dos salsas por separado las mezclaron a mala leche con las patatas, resultando en una argamasa difícil de digerir. Pero todo lo mencionado líneas arriba se queda corto considerando el pésimo trato recibido por parte del repartidor (un hombre de mediana edad, unos 50, con cara de pocos amigos). Desde el momento de su llegada, el trato recibido fue nefasto, ni tan siquiera se dignó a bajar del vehículo. Al parecer no encontraba la puerta del domicilio y llamó por teléfono para recibir indicaciones, la conversación no fue muy fluida ya que solo se le escuchaba gritar. Su estado de ánimo no aminoró a la hora de entregar el pedido. Finalmente salió de vehículo con el datáfono para cobrar y acto seguido se volvió a meter en el mismo, diciendo que abriese la puerta del copiloto cogiera mi pedido y después le cerrase la puerta de muy malas maneras. Ni un hola, ni un adiós, ni un gracias, tan solo berridos. En mi opinión una persona así no está capacitada para trabajar de cara al público. Resumiendo, mi indignación radica principalmente en el trato del repartidor y no en el producto en sí. Una pena el no haber podido disfrutar la comida por el mal sabor de boca resultado de ese fatídico encuentro.
Pedimos unas croquetas de jamon, eran como pelotas de tenis y muy bastas. Bocatas con demasiado aceite para mi gusto, y lo de la cebolla caramelizada nada (más bien algunos trozos crudos, para caramelizar hay que invertir mucho tiempo y aquello estaba casi sin hacer). Una pechuga recalentada que casi se necesitaba un cuchillo. Y unas pizzas muy pequeñas y con poco relleno para el precio que tienen. Atención muy buena.
Muy lindo lugar, la carta variada y deliciosa, pedimos una pizza que podíamos agregar 4 ingredientes a gusto. Muy a gusto !!
Buaaaaa las mejores pizzas y hamburguesas de la zona y la pareja que trabaja allí son muy maja