Panda - Bilbao

Hemos pedido para dos personas un variado de uramakis (venían 16 por unos 24€ estaban ricos, bien elaborados y cantidad correcta. Luego como plato para cada uno hemos pedido un Ramen que estaba buenísimo pero el Pad Thai estaba incomible; la pasta estaba pasada de cocción, no picaba ni un poquito y ponía que llevaba el chilli picante, los langostinos aparte de ser congelados (que eso me lo espero eran verdaderamente malos, ni cocinados ni aliñados… y todos estaban sin limpiar por lo que tenían la tira negra bastante desagradable. Los cacahuetes de paquete tirados por encima… un cacho de lima minusculo y seco… vamos un pena de plato. La camarera me ha preguntado porque él plato estaba entero pero ya habíamos compartido el ramen y no queríamos otro plato. Me han invitado a los cafés pero no me vale. Se que no es un sitio de buen producto, pero que en muchas cadenas el Pad Thai es mil veces mejor. Muy insatisfecha. No volvería.

Fuimos para celebrar mi cumple. Yo elegí el restaurante porque me gusta mucho y hacía tiempo que no íbamos. De entrante cogimos gyozas que estuvieron muy buenas. De principal yo cogí un uramaki panda y mi novio el del día. Los sushi la verdad que estaban muy sin más, no malos, pero sin sabor. De tercero, cogí unas costillas con patatas dado y salsa barbacoa que estaban brutales. Mi novio pidió un arroz pero no le gustó mucho, estaba un poco soso de sabor dijo. Por último, ambos pedimos brownie, buenísimo.

Hermosos interiores de estilo industrial y comida excelente con porciones grandes. Desde afuera parece tranquilo y bastante vacío, pero la mayoría de las mesas no son visibles desde la calle y nos llevaron a nuestra mesa. ¡Nos sorprendió lo concurrido que estaba! ¡Parecía muy vacío desde la calle!

No está mal, hay mucha comida para elegir, excelente servicio, pero a veces un poco lento, lo cual es comprensible considerando que el restaurante estaba lleno de clientes. Definitivamente volvería.

Me encantó este lugar. La decoración es hermosa y apropiada. Hay muchas opciones vegetarianas, lo cual es un cambio refrescante en el País Vasco. Además, el servicio es amigable y rápido.