Alborz - Críticas y comentarios

Tuve el placer de cenar en Alborz en Madrid ayer, y fue una experiencia que vale la pena compartir. Para empezar, pedí las albóndigas kofteh (una mezcla de carn... leer más Tuve el placer de cenar en Alborz en Madrid ayer, y fue una experiencia que vale la pena compartir. Para empezar, pedí las albóndigas kofteh (una mezcla de carne de res y cordero) y fueron simplemente extraordinarias. Sin duda, las albóndigas más suaves que he probado, tan tiernas que parecía un milagro que se mantuvieran intactas. Al tocarlas, prácticamente se deshacían, lo cual fue perfecto para absorber la rica y sabrosa salsa en la que venían. Corté pedazos del pan acompañante y los remojé en la salsa, lo que elevó todo el plato a otro nivel. De plato principal, elegí el clásico kubedeh, que llegó con unos pimientos y tomates perfectamente a la parrilla, además de una generosa porción de arroz con azafrán. El kubedeh estaba jugoso y cocido a la perfección, con ese maravilloso sabor ahumado típico de una buena parrilla. Aunque para mi gusto le faltaba un toque más de sal, aprecié que el restaurante lo sirviera así, permitiendo a los comensales ajustar a su preferencia. Decidí disfrutarlo tal cual, y no me decepcionó. De postre probé el faloodeh, un refrescante dulce persa hecho con fideos de vermicelli y helado. Este venía con helado de azafrán y dos deliciosas salsas, de cereza y limón. Viniendo de Pakistán, estoy más acostumbrado al faloodeh con jarabe de agua de rosas, pero la salsa de cereza fue un giro sorprendente y brillante que añadió un toque de frescura al plato. Literalmente, fue la guinda del pastel. Una mención especial para Anita, nuestra camarera, que hizo la experiencia aún mejor. Fue increíblemente amable, atenta y profesional, guiándome por el menú y asegurándose de que disfrutara cada plato. El ambiente y la iluminación de Alborz también merecen elogios: logran un equilibrio perfecto entre acogedor y elegante, haciendo del lugar ideal tanto para comidas casuales como para ocasiones especiales. En resumen, Alborz es una visita obligada para quien quiera explorar sabores auténticos persas en Madrid. Desde las albóndigas kofteh que se deshacen en la boca, pasando por el jugoso kubedeh, hasta el refrescante faloodeh, cada plato fue preparado con esmero y lleno de sabor. Sin duda volveré. Tipo de comida: Cena Precio por persona: 30–40€ Comida: 5 Servicio: 5 Ambiente: 5

Un lugar agradable con un ambiente cálido y acogedor, hermosa música folclórica y comida increíblemente deliciosa. Los platos están llenos de sabor y el servici... leer más Un lugar agradable con un ambiente cálido y acogedor, hermosa música folclórica y comida increíblemente deliciosa. Los platos están llenos de sabor y el servicio es excelente, perfecto para una noche memorable. Tipo de comida: Cena Comida: 5 Servicio: 5 Ambiente: 5

El servicio, el equipo, el ambiente y la comida fueron perfectos. Comida: 5 Servicio: 5 Ambiente: 5 Tipo de comida: Almuerzo Precio por persona: 20–30 € leer más El servicio, el equipo, el ambiente y la comida fueron perfectos. Comida: 5 Servicio: 5 Ambiente: 5 Tipo de comida: Almuerzo Precio por persona: 20–30 €