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Contribuir a la retroalimentaciónAunque el restaurante es considerado un clásico de la gastronomía murciana, algunas opiniones han señalado que la presencia excesiva de foie en los platos puede ser un detalle que desilusiona a algunos comensales. Sin embargo, la calidad de la comida es valorada positivamente, con sabores deliciosos. Por otro lado, el restaurante es destacado por ser un lugar excelente para celebraciones, como bodas y bautizos. Los menús de tapas son especialmente recomendados, con sabores originales y deliciosos. La relación calidad-precio es vista positivamente. En general, el restaurante Acuario se destaca por ofrecer una cocina de calidad, elegante y con presentaciones sorprendentes. Su elegancia clásica y un servicio excepcional lo convierten en una excelente opción para disfrutar de una comida deliciosa y bien presentada.
Desde que se comienza la experiencia hasta que se termina tiene todas las estrellas. La comida está deliciosa, sin perder la esencia de los sabores tradicionales. La presentación es un espectáculo en algunos platos. El ambiente muy cuidado, con esculturas sorprendentes de la catedral de Murcia o el Santuario de la Fuensanta hechas en azúcar. El servicio es muy amable. Repetiremos.
Comenzamos con un mousse de foie con jalea de Monastrell y compota de manzana realmente bueno. De los mejores probados este año. Para los platos principales tomamos la hamburguesa de pato con queso Provolone y cebolla confitada, muy rica pero demasiado pequeña y Chateaubriand de solomillo de ciervo con trompeta negra muy bien de punto, sabor y cantidad. La carta de vinos orginal en el sentido de que viene con las fotos de los vinos. Sobre el personal, una chica bastante diligente pero el supuesto maitre no sabía abrir la cápsula de la botella y no dio a probar el vino que además estaba tirando a caliente y tuvimos que pedir que lo enfriaran. Otro error es que en la cuenta venía cobrado un pan que no comimos y tuvimos que pedir que lo eliminaran. En resumen, bastante bien lo comido pero manifiestamente mejorable lo relacionado con el servicio.
Comenzamos con un mousse de foie con jalea de Monastrell y compota de manzana realmente bueno. De los mejores probados este año. Para los platos principales tomamos la hamburguesa de pato con queso Provolone y cebolla confitada, muy rica pero demasiado pequeña y Chateaubriand de solomillo de ciervo con trompeta negra muy bien de punto, sabor y cantidad. La carta de vinos orginal en el sentido de que viene con las fotos de los vinos. Sobre el personal, una chica bastante diligente pero el supuesto maitre no sabía abrir la cápsula de la botella y no dio a probar el vino que además estaba tirando a caliente y tuvimos que pedir que lo enfriaran. Otro error es que en la cuenta venía cobrado un pan que no comimos y tuvimos que pedir que lo eliminaran. En resumen, bastante bien lo comido pero manifiestamente mejorable lo relacionado con el servicio.
Este restaurante de toda la vida , diría que ha aparecido en mi top 3 automáticamente . Fuimos a cenar , desde el ambiente , tranquilo y súper hogareño . El servicio : un 10 , la chica que nos atendió genial , y el cocinero que salió a hablar con nosotros porque nos quedamos los últimos . La comida … en este caso la cena : hacía tiempo no probaba una cocina taaaaan sabrosa , cada bocado una explosión de sabor , todo riquísimo y unos postres de infarto , lo disfrutamos , una presentacion además de 10 …. Que decir , me ha encantado y repetiré sin duda . Tienen una carta de vinos estupenda además
Siguiendo nuestro recorrido por los menú del día, hemos descubierto el de este restaurante: por 20 euros tienes entrante, primer y segundo plato, postre y bebida y siempre a elegir, al menos entre dos posibilidades. Y todo riquísimo. De lo mejor de Murcia. A alabar el gazpacho de sandía. Carta muy interesante y también con menú degustación.
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