Latinta - Toro

En mi reciente viaje por tierras zamoranas para disfrutar de su patrimonio románico, en mi visita a Toro, tras el continuo buscar donde comer preferentemente de... leer más En mi reciente viaje por tierras zamoranas para disfrutar de su patrimonio románico, en mi visita a Toro, tras el continuo buscar donde comer preferentemente de menú, y a ser posible asequible, me decidí por este bar restaurante que, a pesar de estar en la plaza mayor, se encuentra algo escondido en un lateral del ayuntamiento. El local tiene una decoración moderna y lo más importante, un delicioso menú de 10 euros bien presentado y bien servido por su educado y simpático propietario.

Bar restaurante en el centro de Toro con raciones de gran calidad, ambiente y buena relación calidad precio leer más Bar restaurante en el centro de Toro con raciones de gran calidad, ambiente y buena relación calidad precio

Bar-restaurante con decoración original y comida casera, ubicado a escasos metros de la colegiata. La comida está muy bien, salvo detalles puntuales, como poner... leer más Bar-restaurante con decoración original y comida casera, ubicado a escasos metros de la colegiata. La comida está muy bien, salvo detalles puntuales, como poner demasiado pimentón en la carne guisada, aunque eso puede ser también cuestión de paladares.

Bien para tomar una cerveza, pero las gambas al ajillo eran langostinos. En cuanto a la decoración creéis que han destrozado la original que debía de ser muy bo... leer más Bien para tomar una cerveza, pero las gambas al ajillo eran langostinos. En cuanto a la decoración creéis que han destrozado la original que debía de ser muy bonita

Todo riquísimo. Cenamos 2 personas con los champys, patata mixtas, pincho moruno y ensalada Arca. Bebimos 2 copas de vino Peña Rejas joven ecológico. No es temp... leer más Todo riquísimo. Cenamos 2 personas con los champys, patata mixtas, pincho moruno y ensalada Arca. Bebimos 2 copas de vino Peña Rejas joven ecológico. No es temporafa alta y nos sirvieron en en abrir y cerrar de ojos, literalmente. Hai sitio dentro y fuera. Sólo pediría que me sirvieran el vino en mi presencia para ver la botella. En fin, un acierto.