Anna & Otto - Bogotá

Les hablo sobre lo que probé:Entrada: guisantes con parmesano. Bien, buen sabor, un plato muy sencillo. Pizza: Anna y Otto. Regular, el borde quemado y sin un s... leer más Les hablo sobre lo que probé:Entrada: guisantes con parmesano. Bien, buen sabor, un plato muy sencillo. Pizza: Anna y Otto. Regular, el borde quemado y sin un sabor que marque la diferencia. Postre: crema catalana de frutos rojos. Rico, buena textura y sabor. El lugar es pequeño, agradable, pero no sobresale nada en su decoración.

Tienen un horno de leña que se nota en todo lo que hacen. SObretodo las pizzas. Son riquísimas con toppings super sencillos que funcionan. Las entradas y otros... leer más Tienen un horno de leña que se nota en todo lo que hacen. SObretodo las pizzas. Son riquísimas con toppings super sencillos que funcionan. Las entradas y otros platos al horno tb son muy buenos... tomamos unos guisantes y un lomo riquísimos. Lo único malo fue un carpaccio que venía muy muy frío por lo que es difícil de disfrutar. Tienen buena variedad de cervezas.

Un muy buen descubrimiento. Una comida elegante y sencilla con ingredientes naturales. Muy buena calidad de los productos leer más Un muy buen descubrimiento. Una comida elegante y sencilla con ingredientes naturales. Muy buena calidad de los productos

Este restaurante es una joya escondida en una zona residencial. La pizza funghi era tan buena que tuve que pedir pizza para llevar. El personal era amable y efi... leer más Este restaurante es una joya escondida en una zona residencial. La pizza funghi era tan buena que tuve que pedir pizza para llevar. El personal era amable y eficiente. Fueron pacientes con mi pobre español. El restaurante en sí es pequeño, pero está bellamente diseñado.

Fuimos aquí después de leer algunas excelentes críticas y la pizza que comimos estuvo muy buena. Lo que se sintió más desagradable fue que la camarera fue grose... leer más Fuimos aquí después de leer algunas excelentes críticas y la pizza que comimos estuvo muy buena. Lo que se sintió más desagradable fue que la camarera fue grosera con nosotros al saber que solo sabíamos un poco de español. Al entrar, preguntamos si tenían un menú en inglés como algunos restaurantes en Bogotá y algunos no, esto no era un problema, pero ella rodó los ojos. Después de que solo teníamos 1 menú para los 3, pedimos más menús, entonces corrió hacia sus colegas, quienes no sabían leer español. Luego se esforzó por hablar rápidamente en español tratando de demostrar un punto. Creo que tuvo un mal día. Después, rodó los ojos más cuando pedí que no pusieran hielo en mi bebida, creo que cualquier acción era una molestia para ella. Fuimos educados en todo momento, pero no volvimos y nos sentimos decepcionados con el trato recibido.