Sorrento Madero - Buenos Aires

SORRENTO es un clásico entre los restaurantes de la Ciudad de Buenos Aires. Recuerdo haber ido hace mucho tiempo, hace 40 años, cuando era uno de los lugares donde se comía mejor, ya desde ese entonces en el centro de esta capital. Todavía conserva la misma fama, que ha mantenido a pesar de los años que han transcurrido. Se especializa en cocina mediterránea: sus pescados, mariscos y pastas son excelentes. También sus risottos. La atención es amable y el ambiente tranquilo y sobrio. Ideal para comidas de negocios ya que está pegado a la ciudad porteña. Abre de lunes a sábado todo el día. Cierra los domingos. Actualmente ofrece un menú especial que detallo en las fotos con un precio de $84.- por persona, incluye servicio de mesa y $99.- que agrega una botella cada dos personas de Cabernet Sauvignon o Chardonnay de Bodegas Alamos.

Fuimos a cenar, el restaurante no estaba lleno, la botella de vino tinto estuvo genial ya un precio muy razonable, pedimos ostras y un plato grande de pescado y marisco para dos, estuvo genial. También pedimos un tequila mexicano "el patrón "Un trago muy caro, deberíamos pedir otro par de botellas de vino por el precio de los dos tragos. Pero esto fue lo único malo de nuestra gran experiencia gastronómica. Me encantaría volver.

Excelente comida, pero pedimos un plato para dos y no fue suficiente. El lugar también tiene una linda vista ........................

El paseo marítimo es un lugar ideal para los amantes de la comida. Una noche, mientras mi esposa y yo paseábamos junto al agua, este lugar nos llamó la atención. Es uno de los restaurantes que abre antes que los demás. En general, la mayoría de los restaurantes abren a las 8:00 p.m. Fue una de las mejores comidas de cocina italiana que hemos tenido. El ravioli estaba perfectamente hecho, la comida de espagueti que pidió mi esposa era igualmente fresca y perfecta. Ofrecen una extensa lista de vinos con una amplia gama de precios. Disfrutamos de un Malbec joven por unos $ 22. Los camareros eran excepcionales y muy atentos. También tiene unas vistas increíbles del paseo marítimo y un maravilloso ambiente no turístico.

Estábamos caminando y esta fue nuestra última noche en Argentina. Los mariscos sonaban bien, así que decidimos probar este lugar. No nos decepcionó. Nos sentamos en el patio y disfrutamos de la vista y de la gente que miraba. Pedimos una buena botella de vino. Mi esposa tenía las vieiras y yo tenía camarones. Los camarones estaban buenos, pero las vieiras fueron probablemente la mejor comida que tuvimos en Argentina. El servicio no fue demasiado amable, pero fueron muy eficientes. Los precios generales eran razonables para lo que pedimos.