El término "superalimento" lleva años en boca de todos. Alimentos que no sólo son sanos, sino que también promueven, fortalecen y estimulan esto y aquello. Suena como un pequeño sueño.
Los superalimentos se pueden encontrar en todos los colores. Ya sea en tonos baya o en blanco. Ya sea en rojo, negro y blanco mezclados. O en verde... Aquí es exactamente donde se encuentra nuestro representante actual: ¡el aguacate!
Milagro verde
En el pasado, los aguacates eran evitados por todos aquellos que se comprometían a perder peso debido a su alto contenido en grasa. Sin embargo, ahora se sabe que los alimentos ricos en grasa con moderación no conducen a la obesidad; de hecho, ayudan a mantener o reducir el peso porque sacian durante más tiempo.
Como el aguacate es uno de los frutos de baya -a pesar de su forma y color menos parecidos a los de las bayas-, contiene naturalmente no sólo grasa, sino también vitaminas. Entre ellas están las vitaminas A, D, E y K. El aguacate también contiene carotenoides (aunque no sean de color naranja), biotina, ácido fólico y calcio. Además, el aguacate contiene todos los aminoácidos necesarios, ¡por si esto no fuera un todoterreno!
Además de los ingredientes, también se sabe que el consumo de aguacate tiene un efecto positivo sobre los niveles de colesterol. Reduce el indeseado colesterol LDL, disminuyendo así el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
¡¿Sólo tienes que morderlo?!
Un aguacate como éste no sólo tiene casi todo lo que necesitas. También puedes disfrutarlo en casi cualquier forma. Puedes cortarlo, hacerlo puré, cocinarlo, asarlo, todo es posible:
- Guacamole (la salsa de aguacate)
Esta salsa, originaria de México, suele prepararse y servirse en la barbacoa o con patatas fritas o nachos. Además del obvio ingrediente principal, el aguacate, también se añaden tomates. Después, esta mezcla se refina al gusto con cilantro, ajo, cebolla y lima.
- Pasta de aguacate y arroz
Ya sea como pesto, salsa o en trocitos. Puedes condimentar casi cualquier plato con el aguacate.
Similar al plátano al horno conocido de los asiáticos, también puedes hornear el aguacate. Puedes empanarlos ligeramente y meterlos en el horno o incluso freírlos en una buena capa de rebozado.
En trozos o tiras en la ensalada, el aguacate también puede contribuir al sabor general de la ensalada.
El aguacate también se encuentra a menudo en el sushi. Debido a su sabor graso pero único, se mezcla con arroz, pescado y hojas de algas.
Y además del sabor...
El aguacate no sólo te ayudará a perder peso por su largo periodo de saciedad, sino que también te proporcionará una piel bonita. La razón de ello es la vitamina E y los carotenoides. Éstos también hacen que se diga que el aguacate es bueno para los ojos.
¿Hay algo que no sea tan bueno?
En realidad, sí lo hay. Debido al hecho de que los aguacates se cultivan en supermercados y grandes superficies de países como Israel, México, pero también a veces en Italia, hay que decir, por el bien del medio ambiente, que el consumo excesivo no puede llamarse directamente sostenible.